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El Reloj del Futuro que Nadie Entendía: La Odisea del Pulsar Digital

Story

Imagen Smart Watch Android / ios

En la década de 1970, cuando los relojes digitales comenzaron a popularizarse gracias a los avances en la tecnología LED y LCD, se convirtieron en un símbolo de modernidad y estatus.

Sin embargo, su llegada también generó situaciones divertidas y curiosas. Una de las más recordadas ocurrió en 1972, cuando Hamilton Watch Company lanzó el primer reloj digital comercial, el Pulsar Time Computer.

Este reloj era tan revolucionario que se promocionaba como un dispositivo "del futuro", y su precio inicial era de unos 2,100 dólares (equivalente a más de 13,000 dólares actuales, ajustado por inflación), lo que lo hacía más caro que muchos automóviles de la época. 

La anécdota curiosa surge con un cliente que, fascinado por la tecnología, compró uno de estos relojes y lo presumía en todas partes. Sin embargo, se dio cuenta de que algo extraño ocurría: el reloj parecía "parpadear" o apagarse de vez en cuando. Preocupado, lo llevó de vuelta a la tienda, pensando que estaba defectuoso.

Tras una inspección, el técnico descubrió que no había ningún problema con el reloj.

Lo que sucedía era que el propietario, sin saberlo, estaba activando una función de ahorro de energía: el Pulsar tenía un botón que debía presionarse para mostrar la hora, ya que la pantalla no estaba diseñada para estar encendida todo el tiempo (esto era para preservar la vida de la batería y los LEDs).

El cliente, acostumbrado a los relojes analógicos que siempre muestran la hora, no había leído el manual y pensaba que el reloj estaba "roto" porque no entendía su funcionamiento.

Esta historia se volvió una especie de chiste en la industria relojera y sirvió como lección para los fabricantes, quienes comenzaron a incluir instrucciones más claras y a diseñar interfaces más intuitivas. Además, este episodio ilustra cómo la transición de lo analógico a lo digital no solo fue un cambio tecnológico, sino también cultural, ya que las personas tuvieron que adaptarse a nuevas formas de interactuar con el tiempo.